lunes, 22 de junio de 2015

LA CIUDAD DEL FUEGO, RUPAC


“Para llegar alto, sueña profundo, porque cada sueño procede a la meta deseada”.

Rúpac, el “Machu Picchu Limeño”, “La ciudad de fuego”, “La ciudadela escondida”, entre otros, son los nombres que ha tomado este lugar por los diferentes viajeros, mochileros, turistas y hasta reporteros que han visitado la zona. A pocas horas de Lima, es uno de los destinos que no puedes dejar de visitar. Llegar no es nada complicado. Así que, prepara tu mochila, y ¡vámonos!

¿Como llegamos?

Tu recorrido empieza en Huaral, por lo que puedes tomar un bus llamado Z-Bus que te lleva desde Acho (Lima) hasta el terminal terrestre en Huaral. (Costo – 8.00 soles)

Estando en Huaral, debes ir a la plaza de armas. Allí mismo hay una caseta de información turística donde te dicen cómo llegar a La Florida o Pampas, que es nuestra siguiente parada.

El paradero de los colectivos a Rúpac:

Hay diferentes autos particulares (colectivos) que te llevan a Pampas (donde empieza tu caminata a Rúpac). (Costo por persona 25.00 c/u x 6 pasajeros). Si vas solo debes esperar a que el colectivo tenga los 6 pasajeros, caso contrario sociabiliza, haz tu mancha y lánzate a la aventura. (Dirección de paradero: Calle La derecha 875).

En mi caso, nos empatamos con una pareja y unos trabajadores que se 
quedaron en la yunza que estaban haciendo en La Florida.

El camino es tranquilo, lleno de curvas. Lleva buena música y disfruta el paisaje.

Un dato: Si vez el camino completamente nublado no te angusties, cuando pases el distrito de “San Miguel” (Km 36) notarás el cambio: “Cielo despejado, sol resplandeciente y mucho calor”.


Estando en el colectivo, empecé a preguntarle algunas cosas al conductor para hacer el viaje más entretenido - y para que no se duerma – Y me comentó algunos datos:

Mejores meses para ir a Rúpac: Abril – Mayo y  Agosto – Septiembre
¿Por qué? El 1 y 2 de setiembre hay fiesta patronal en Pampas. Y el 5 y 6 de Agosto es la fiesta en Huaral.

¿Clima? Siempre hay sol en Rúpac.

Los autos hacen una parada en La Florida, aquí es donde tendrás la última oportunidad de abastecerte de agua y provisiones (comida) para un ascenso de dificultad moderada.



La idea era llegar en un horario donde en 1 día completo podamos ver el atardecer y el amanecer. Para ver el atardecer debes arrancar desde Pampas a las 3:00 pm. Caso contrario, verás el atardecer en medio de la montaña y no desde la cima – como pasó en mi caso – yo empecé la subida a Rúpac a las 4:30 pm desde Pampas, pero aun así, verás el cielo teñido de color rojo.




¿Y luego?

El ascenso es de aproximadamente 3 horas, dependiendo de tu ritmo al 
caminar, y también de cuanto peso lleves en la mochila – esto puede dificultarte un poco las cosas – por lo que tendrás que detenerte a descansar cada cierto tiempo.


Llegué a Rúpac de noche con hambre, frio y cansada. Lo único que quería hacer era armar mi carpa para poder cambiarme la ropa, abrigarme como oso polar, comer y descansar.

Hice todo lo mencionado excepto descansar, cuando llegué a la explanada para acampar me encontré con un grupo de 14 chicos y chicas de la universidad de Huacho que habían ido a hacer su salida de campo. La fogata ya estaba armada, y ¡En la montaña todos somos amigos! Nos pusimos a conversar, compartir la poca comida que teníamos, tomar un poco de vino para entrar en calor y escuchar música – ¡Gracias por el grato momento chicos! La próxima yo pongo el vino.

Amanece a las 5:45 de la mañana, así que, preciso momento para abrir tu carpa y ver el amanecer. 



A menos de 10 metros de donde acampaste, subes un par de gradas y ante ti verás La ciudadela de Rúpac, algunas construcciones están en perfecto estado. Puedes recorrer la zona libremente, pero siempre cuidando el lugar.

El descenso es mucho más rápido, pero con un sol que te deshidratará más rápido de lo que imaginas.

Recomendaciones:

- Distribuye bien el agua que lleves, o terminarás tomando agua de la catarata – como yo.

- Échate bloqueador, o te vas a broncear de manera intensa.

- Pisa bien, algunas rocas están sobrepuestas.

- Coordina con el colectivo que te llevó a Pampas para que también te recoja, porque caso contrario no encontrarás ni un solo auto – ni para un aventón.

¿Una ayudita?


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Un abrazo mochilero,

Brenda Oq.

jueves, 18 de junio de 2015

¿Porqué acampar será una de las mejores experiencias en tu vida?


Cuando vas de viaje haciendo planes para acampar, siempre pasan cosas impredecibles, conoces a personas que te enseñarán algo de sus sabios conocimientos como campistas, o también te reirás de alguno que se creía fuerte diciendo que no tiene frío y a las horas está más congelado que trasero de pingüino. 

Sin embargo dejando todo eso a un lado, te das cuenta que es ¡Una increíble experiencia!

Si aún no has acampado, aquí te dejo una lista de algunas cosas que te aseguro pasarán mientras acampes. Y si ya has acampado, apuesto que empezarás a recordar algún viaje que has hecho.

¡Vamos, recordemos!

1. Te hiciste amigos de chicos/as que jamás pensaste conocer.

2. Al lado de la fogata conversaron como si se conocieran de niños.

3. Siempre te das cuenta que el agua que llevaste no fue suficiente.

4. Si nadie tenía agua, el agua de catarata o de río es una delicia.

5. Por más que lleves poca comida ¡Todo se multiplica! Y terminarás compartiendo -  Se convierte en un buffet.

6. Cuando estás caminando solo y te encuentras a otro viajero en el camino, cualquier excusa es buena para empezar una buena charla – Claro, que en este caso jamás usarás la frase ¿tienes hora?, porque “Mochilero que se respeta, no usa reloj”.

7. Las mochilas improvisadas nunca faltan – son esas donde cuelgas la bolsa de dormir, la colchoneta, el carbón o la leña con pasadores.

8. Has comido cosas que jamás hubieras probado en la ciudad.

9. Te comes la comida así esté con cenizas y carbonizado porque se cayó en el fuego.

10. Si se te congelaron los pies, te quitaste los zapatos y colocaste tus pies al lado de la fogata – Claro que nunca falta alguien a quien se le rostizan y sale corriendo.

11. Despertar, abrir la carpa y ver el paisaje delante de ti, es increíble.

12. Es probable que tu primer campamento haya sido un desastre, pero aun así volviste a viajar, y volviste a acampar.

13. Siempre – ojo, siempre – te olvidas de algo.

14. Siempre, alguien tendrá ese “algo” que te olvidaste.


15. Por más valiente que seas, si escuchas un sonido extraño fuera de la carpa, no sales a ver – acampando nadie se cree súper héroe.

16. Sólo tú conoces lo horrible que puede ser sentir mucho frío. Y si pasaste frió acampando, es probable que haya sido la noche más larga de tu vida.

17. Si ven que estás cansado y no puedes más, alguien gritará ¡Vamos, tu puedes! ¡Sigue!. Esas palabras de aliento nunca faltan.

18. Y lo más importante ¡Todos somos amigos! 


Puedes ir a donde quieras, donde el presupuesto y las ganas te lo permitan, puedes acampar con mucho frío, sentir que las piernas no te dan para más, pelear con  los  insoportables  mosquitos, comer los mismos alimentos enlatados durante varios días, mojarte por la noche, soportar una invasión de arañas y, pese a todo, estar completamente feliz de estar donde estás.


¡Nos vemos en la montaña!

Un abrazo mochilero,
Brenda Oq.


miércoles, 10 de junio de 2015

¿Cómo acampar en el frío y no morir en el intento?



Después de haber escuchado distintos tips y haberme congelado literalmente con 7°C a más de 4,500 m.s.n.m, llegué a la conclusión de que nada supera el calor corporal de alguien durmiendo a tu lado – Y también que, nada es más divertido que escuchar “¿Ya-ya-ya-ya amaneció? ¿Ya-ya-ya-ya salió el sol? ¡Te-te-te tengo frió!

¡Claro que si nadie va contigo, harto papel aluminio!

Acampar en una zona con clima templado – ni tanto frío, ni tanto calor – es placentero, no estás sudando por el extremo calor, ni tampoco estas titiritando de frío deseando morir para no sentir como el frío traspasa tus huesos y, que por más que hagas lo que hagas, sigues sintiendo frió. Bueno, eso, no es nada bonito.

Por suerte, hay muchas maneras de sobrevivir a ello.


1. La Ropa


La ropa es muy importante ya que será el primer medio por donde ingresará el frío, debes saber que los alpinistas, montañistas o cualquier deportista extremo profesional tienen una manera de abrigarse: EN CAPAS.

La Primera Capa - Es la más cercana al cuerpo
Puedes usar un calentador, o algunas prendas que tienen una capa muy parecida al aluminio, esto hará que el calor se aísle y te mantengas más abrigado. Esta capa hará una especie de rebote entre tu calor corporal y la 1ra capa.

La Segunda Capa - Prenda cálida + Amplia
Una prenda que funciona perfectamente son los de material polar o lana, la idea es retener el calor, haremos que el calor no escape. La prenda amplia creara una capa protectora de aire caliente entre tu piel y el ambiente al otro lado de la tela. ¡Protege las extremidades!

La Tercera Capa.- Cortaviento
Las prendas cortaviendo e impermeables estan hechas del matrial NEOPRENO - esas que parecen plástico - este material te protegerá de la lluvia y del viento, – te recomiendo que ajustes la abertura que va hacia las piernas porque el viento – te lo aseguro – ingresará por allí. La idea es repeler el frío, viento, agua ¡TODO!

Hay muchas marcas de ropa Outdoors donde puedes conseguir esta ropa con la mejor tecnología, o hasta 2 capas en una sola prenda. Entre ellas tenemos Columbia y The NorthFace. Estas son las dos principales, también Tatoo donde venden una mezcla entre su propia marca pero también podrías encontrar ropa de otras marcas. Cada una es buena en su estilo, todas te servirán, sin embargo los precios varian entre el más alto y los más comodos. ¡Pero no te angusties! Consigue ropa como la que te mencioné lineas antes, y lo de menos será la marca.

2. ¿Y al dormir?
  • Coloca la carpa de manera perpendicular al viento.
  • Si vas a acampar en grupo, coloca los sacos de dormir lo más juntos posible.
  • Una esterilla o colchoneta base de aluminio servirá de protección para que el frío acumulado en el suelo no traspase el saco de dormir – algo que también funciona es colocar paja o hierbas bajo la carpa.
  • Coloca una manta polar envolviendo el saco de dormir.
  • Cámbiate de ropa antes de dormir – luego te explico porque.
  • Evita transpirar.

Trucos que pocos mochileros mencionan

Te ha pasado que, por más que te abrigues bien, que montes una buena fogata y que la carpa sea impermeable ¡¿Has sentido frío?! Aquí te digo un par de trucos mas:

- Si vas a acampar puedes calentar agua en una botella o bolsa térmica y colocarla en la bolsa de dormir o en tus piernas.

- Cuando la ropa es ajustada no te mantendrás caliente ni cómodo. Si quieres mantenerte caliente usa ropa suelta. ¿Por qué? Crearás una capa protectora de aire caliente entre tu piel y el ambiente al otro lado de la tela.

- ¡Muévete! Esto hará que generes calor.

- Cámbiate de ropa – Al estar con la ropa con la que caminaste todo el día, la tierra, el polvo y hasta sudor ha creado una capa – que no puedes notar claro – que bloqueara el calor por más que te abrigues, más aún porque tus poros están cerrados. Por lo que debemos eliminar el sudor, por ello debemos lavarnos. Empezando por el torso, y finalmente secándonos por completo con una toalla.

¡No transpires! - ¿Por qué? La transpiración se enfría y te enfriarás tú.


Un poco más de ayuda nunca está de más

- ¿Tienes los pies helados? ¡Ponte una gorra! – Si te pones el gorro en la cabeza, tu cuerpo ya no tiene que protegerla del frío y por tanto se podrá concentrar en calentar los pies.

- Mete las piernas en tu bolsa de dormir y a la vez en tu mochila vacía, así se conserva mejor el calor.

- Calienta un poco de agua y colócala en un par de botellas. Las botellas ponlas debajo de tus piernas y axilas – Cuidado que no deben estar muy calientes o podrían derretirse y quemarte. 

¡Nos vemos en la siguiente aventura!
 
Un abrazo mochilero,
Brenda Oq.